domingo, 16 de octubre de 2016

Citas de libros #12: Amor en verso (especial poemas) - Colleen Hoover (Planeta)

¡Buenas tardes! Acabamos la semana un especial Slam (poemas) del libro Amor en verso de Colleen Hoover publicada por Planeta.

Lo llamo especial porque para no hacer la entrada demasiado larga solo voy a poner los poemas que me han gustado (aunque a decir verdad creo que están casi todo jaja). Más adelante haré otra entrada con mis frases favoritas.


Pum, pum, 
pum, pum, 
pum, pum. 
¿Lo oyes?    

Es el latido de mi corazón.   

Pum, pum, 
pum, pum, 
pum, pum. 
¿Lo oyes

Es el latido de tu corazón. 

Era el 1 de octubre. Llevaba puesto mi jersey 
azul, el que me compré en Dillard’s, ¿te acuerdas? 
El del dobladillo en punto doble, 
con agujeros en las bocamangas 
por los que podía asomar los pulgares 
cuando hacía frío pero no me apetecía ponerme guantes
Era el mismo jersey que, según tú, hacía que mis ojos 
parecieran reflejos de las estrellas en el océano
Aquella noche me prometiste amor eterno... 
y, ¡tío!, 
¡cómo lo has cumplido

Después llegó el 1 de diciembre. Llevaba 
puesto mi jersey azul, el que me compré 
en Dillard’s, ¿te acuerdas? El del dobladillo en punto doble, con 
agujeros en las bocamangas por los que podía asomar 
los pulgares cuando hacía frío pero no me apetecía 
ponerme guantes. Era el mismo jersey que, según tú, hacía que 
mis ojos parecieran reflejos de las estrellas en el océano
Te dije que llevaba tres semanas de retraso
Me dijiste que era el destino
Aquella noche me prometiste amor eterno... 
y, ¡tío!, 
¡cómo lo has cumplido

Era el 1 de mayo. Llevaba puesto mi jersey 
azul, aunque entonces el dobladillo de punto doble 
estaba gastado y ponía a prueba la resistencia 
de las hebras, bien tensas contra mi vientre abultado
Te acuerdas, ¿no? El que me compré en Dillard’s
El que tiene agujeros en las bocamangas por los que 
podía asomar los pulgares cuando hacía frío pero no 
me apetecía ponerme guantes. Era el mismo jersey que, 
según tú, hacía que mis ojos parecieran reflejos 
de las estrellas en el océano
El MISMO jersey que me ARRANCASTE del cuerpo 
cuando me arrojaste al suelo y 
me llamaste puta 
y me dijiste 
que no me querías 
más. 

Pum, pum, 
pum, pum, 
pum, pum. 
¿Lo oyes

Es el latido 
de mi corazón. 

Pum, pum, 
pum, pum, 
pum, pum. 
¿Lo oyes

Es el latido 
de tu corazón.

¿Lo oyes? Claro que no. Es el 
silencio de mi vientre, 
¡porque tú 
ME 
ARRANCASTE 
EL 
JERSEY!

~ Chica en el Slam del club N9NE
La muerte, lo único inevitable en la vida.

A nadie le gusta hablar de la muerte, porque 
se entristece. 

No quieren imaginar cómo continuará la vida 
sin ellos, 
todos sus seres queridos se apenarán 
por un tiempo, pero seguirán respirando. 

No quieren imaginar que la vida seguirá adelante 
sin ellos
que sus hijos seguirán creciendo
se casarán, 
envejecerán... 

No quieren imaginar que la vida seguirá 
adelante sin ellos, 
que se venderán sus bienes materiales 
y se pondrá fin a sus historias clínicas. 
Su nombre se convertirá en un recuerdo 
para todos sus conocidos. 

No quieren imaginar que la vida seguirá adelante 
sin ellos, de modo que, en lugar de aceptarlo sin ambages
soslayan el tema por completo
esperando y rogando que, de alguna manera... 
pase de largo. 

Que se olvide de ellos 
y pase al siguiente de la fila. 

No, no querían imaginar que la vida seguiría 
adelante... 
sin ellos. 

Pero la muerte 
no 
lo olvidó, 
sino que se dieron de bruces con la muerte, 
que adoptó la forma de un camión de dieciocho ruedas 
tras una nube de niebla. 

No. 
La muerte no se olvidó de ellos

Si al menos hubieran estado preparados, aceptado lo 
inevitable, trazado planes y comprendido que 
lo que estaba en juego no eran sólo sus vidas... 
Es posible que, legalmente, me consideraran adulto a los 
diecinueve años, pero aún sentía 
del todo 
que apenas tenía diecinueve. 
Desprevenido 
y abrumado 
por tener de pronto 
a mi cargo 
toda la vida de una personita de siete años. 

La muerte, lo único inevitable en la vida.

~ Will en el Slam del club N9NE
Las esperanzas, las evaluaciones y las evasiones internas 
se me escapan volando como charcos de sangre de una herida
un feto salido del vientre de un cadáver en una tumba
mustio y desparramado como unas sábanas rojas en la cama 
de una habitación inmaculada. 

No puedo respirar
no puedo ganar

Desde esta posición indeleble en la que me encuentro, 
controla la única parte de mi alma desventurada 
que puede valerse por sí misma en este agujero ahuecado 
que he excavado desde dentro, como un prisionero en 
una celda sin llave, sentado en los abismos más profundos, 
sin preocuparse por no estar en un lugar sofocante. 

Podría abrir la puerta, porque no necesita 
ninguna llave, 
pero, una vez más, 
¿para qué iba a hacerlo? 

La circunlocución es su revolución.

~ Will en clase
Un millón, cincuenta y un mil 
doscientos minutos. 

Ésa es, aproximadamente, la cantidad de minutos que llevo queriéndote, 
la cantidad de minutos que he pensado en ti, 
la cantidad de minutos que me he preocupado por ti, 
la cantidad de minutos que he dado gracias a Dios por ti, 
la cantidad de minutos que he dado gracias a todos los dioses 
del universo por ti. 

Un millón
cincuenta y un mil 
doscientos 
minutos... 

Un millón, cincuenta y un mil 
doscientos minutos. 

Ésa es la cantidad de veces que me has hecho sonreír
la cantidad de veces que me has hecho soñar
la cantidad de veces que me has hecho creer
la cantidad de veces que me has hecho descubrir
la cantidad de veces que me has hecho adorar
la cantidad de veces que me has hecho valorar 
mi vida.

Y exactamente dentro de un millón, cincuenta y un mil 
doscientos minutos te voy a proponer matrimonio 
y te voy a pedir que compartas conmigo todos los minutos 
que te quedan de vida.

~ Gavin en clase
Según el diccionario de sinónimos..., 
y según yo misma..., 
hay más de treinta formas distintas 
de poner verde 
a alguien:

Burro, estúpido, cruel, cabrón, descortés, duro, malvado, 
odioso, desalmado, vicioso, despiadado, implacable, 
despótico, malévolo, execrable, bastardo, 
bárbaro, resentido, bruto, insensible, degenerado, 
salvaje, depravado, avieso, fiero, rudo, inconmovible, 
rencoroso, pernicioso, inhumano, monstruoso, 
sanguinario, inexorable 

y, la que más me gusta a mí, ¡gilipollas!

~ Layken en clase
Me llamo Olivia King 
y tengo cinco años. 

Mi madre me compró un globo. Recuerdo el día 
que entró por la puerta con él. La cinta 
rizada de color rosado intenso le bajaba por el brazo y se le enrollaba 
en torno a la muñeca. Me sonreía mientras se desataba 
la cinta y me la ataba alrededor de la mano. 

«Toma, Livie. Te he comprado esto.» 
Me llamaba Livie. 

Yo estaba tan contenta. Jamás había tenido un globo. Vamos, 
que siempre veía globos atados en torno a las muñecas de otros 
niños en el aparcamiento de Walmart, pero jamás había 
soñado que tendría uno que fuera mío
Mi propio globo rosado. 

¡Estaba tan entusiasmada, tan eufórica, tan contenta! ¡No podía 
creer que mi madre me hubiera comprado algo! ¡Nunca 
me había comprado nada hasta entonces! Jugué con él durante horas
Estaba lleno de helio y bailaba y se balanceaba
flotaba mientras yo lo arrastraba conmigo de una habitación a otra, 
pensando en lugares adonde llevarlo. Pensando en lugares 
en los que el globo nunca hubiese estado. Lo llevé al 
cuarto de baño, al armario, al lavadero, a la cocina
a la sala de estar. ¡Quería que mi nuevo mejor amigo viese 
todo lo que yo veía! ¡Lo llevé al dormitorio de mi madre! 

¿El dormitorio 
de mi madre? 
¿Donde se suponía que yo no entraba? 
Con mi globo 
rosado... 

Me tapé las orejas cuando ella me gritó, mientras se borraba 
la evidencia de la nariz. ¡Me pegó una bofetada
me recordó lo mala que yo era! ¡Lo mal 
que me portaba! ¡Que nunca hacía caso! Me empujó 
al pasillo y dio un portazo y mi globo 
rosado quedó dentro, con ella. ¡Quería que me lo devolviera
Era mi mejor amigo. ¡No el suyo! La cinta rosada seguía 
enroscada en torno a mi muñeca, de modo que tiré y tiré tratando 
de alejar a mi nuevo mejor amigo de ella. 


entonces 
estalló. 

Me llamo Eddie 
y tengo diecisiete años. 

Mi cumpleaños es la semana que viene. ¡Cumpliré dieciocho! Mi 
padre de acogida me comprará las botas que quiero. 
Seguro que mis amigos me invitan a salir a cenar. Mi 
novio me comprará un regalo y puede que hasta me lleve 
al cine. Incluso es posible que reciba una tarjetita chula de la 
asistente social que se encarga de mi acogida, 
en la que me desee un feliz cumpleaños y me informe de que 
por mi edad he quedado fuera del sistema

Me lo pasaré bien. Sé que así será. 
Pero hay una cosa de la que 
estoy segura

¡No quiero que me regalen ningún 
globo rosado de mierda!

~ Eddie en el Slam del club N9NE
Antes me encantaba la mar 
y todo lo relacionado con ella. 
Sus arrecifes de coral, sus cabrillas, el bramido de sus olas
las rocas que lame, sus leyendas de piratas y sus colas de sirena
los tesoros perdidos y los que conserva... 

Y TODOS 
los peces 
de la mar

Pues sí, antes me encantaba la mar 
y todo lo relacionado con ella. 
Que me arrulle hasta que me duerma, tumbado en mi cama
y después me despierte con una fuerza 
que no he tardado en temer
Por sus fábulas, sus mentiras y sus ojos engañosos
la vaciaría hasta dejarla seca 
si de verdad me lo propusiera

Antes me encantaba la mar 
y todo lo relacionado con ella. 
Sus arrecifes de coral, sus cabrillas, el bramido de sus olas
las rocas que lame, sus leyendas de piratas y sus colas de sirena
los tesoros perdidos y los que conserva... 

Y TODOS 
los peces 
de la mar

Pues bien, si alguna vez has tratado de surcar en un velero 
sus procelosas aguas, te habrás dado cuenta de que 
sus cabrillas son tus enemigas. ¿Alguna vez has tratado de 
nadar hacia la orilla con la pierna acalambrada
cuando acabas de zamparte un opíparo banquete de hamburguesas 
que te lastra y sus olas bramantes te 
están dejando sin aire y te llenan los pulmones de 
agua mientras agitas los brazos, tratando de llamar la 
atención, pero tus amigos 
se limitan 
a saludarte 
con la mano? 

Y si has crecido con la cabeza llena de sueños 
sobre la vida y pensando que un día de éstos serías pirata 
con tu propio barco y tu propia tripulación y que todas 
las sirenas 
sólo 
te querrían 
a ti... 

Entonces, te habrás dado cuenta 
—como al final me ha ocurrido a mí — 
de que todo lo bueno que tiene 
y todo lo hermoso 
no es real
sino falso

Así pues, quédate con tu mar 
y a déjame a Lake.

~ Will en el Slam del club N9NE
¿Qué os parecen? ¿Os gusta alguno? Colleen Hoover es de mis escritoras favoritas y a pesar de que Slammed es su primera novela, me llegó al corazón en muchos momentos. Cada uno de estos poemas tiene un mensaje muy profundo :)

Besitos literarios :*


2 comentarios:

  1. ¡Hola!

    Ay... a mí me gustó muchísimo esta novela y me encanta cómo escribe la autora, pero no le vi mucho sentido a muchos de los poemas (lo siento jeje) peeeero reconozco que me encantaron los dos últimos ^^

    ¡Besos!

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    Respuestas
    1. Queeeeeeeee, a mí todos me encantaron, unos me destruian por complero, los poemas hacen el libro. Sin duda una de las partes más escenciales de esta historia es el Slam.

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